En Romanos 8:26 la Biblia dice: Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el ESPIRITU mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Al orar en el ESPIRITU lanzamos gemidos que no se pueden expresar en
palabras normales, Esto incluye también el orar en lenguas. En Ira. Corintios
14:14 dice: "Porque si oro en lengua desconocida, mi espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto." Es como decir que mi espíritu con la ayuda del Espíritu Santo que mora en mi, Ora. Con nuestra mente .natural a veces no sabemos cómo se debe orar, pero el ESPIRITU nos ayuda en nuestra limitación.
No es que el ESPIRITU SANTO ore por uno, pero El le inspira ayudándole en su oración ~. ésta se vuelve poderosamente efectiva.
Esos gemidos que salen de tu espíritu y escapan por tus labios; es el Espíritu Santo ayudándote. Esos gemidos que no se pueden expresar con palabras vienen de tu interior y son inspirados por el ESPIRITU SANTO. Muy a menudo al orar en esta forma se está intercediendo por otra persona. Esta oración como viene inspirada por el ESPIRITU, es siempre en la voluntad de Dios. Gloria a Dios.
Hay oración mental y oración espiritual. Al orar en lenguas se ora en el Espíritu. Si ora con su entendimiento, se ora de la mente. Debemos orar en ambas formas.
Al orar en lenguas su espíritu ora y el Espíritu Santo le da la inspiración. Es nuestro espíritu el que ora. La oración mental se limita a nuestro entendimiento, o nuestro conocimiento. Por eso es insuficiente. La Iglesia ha tratado de llevar a cabo la obra con una sola clase de oración la mental. Eso ha limitado la obra.
(Judas 1:20 Efesios 6:18).
Gemir en la oración y hablar en lenguas implica el Espíritu Santo ayudándonos a orar en intercesión espiritual. Si esto está acompañado de lágrimas, la oración se vuelve aún más poderosa.
Ore para que Dios le unja para interceder en el Espíritu con llanto. Aleluya. (Joel 2:12)

Uno de los instrumentos más poderosos para ser usados en la oración es el orar en lenguas. En 2da. de CORINTIOS 10:4 dice: "Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas" Fíjate que sólo con armas espirituales podríamos destruir las fortalezas del diablo. Algunas de las fortalezas de Satanás jamás serían rotas
hasta que no aprendamos a usar el arma espiritual de la oración en lenguas.

En una ocasión un joven predicador tuvo un accidente y se fracturó el cuello y quedó paralizado de la cintura para abajo. Estaba inconsciente. Su padre, que era un siervo lleno del Espíritu Santo, vino a verlo y al visualizar la situación
tan crítica comenzó a orar en lenguas. Oró por 10 horas. A las 6: A.M. fue a ver al joven y encontró que había recuperado el conocimiento.
Al preguntarle cómo estaba, él dijo: "Dios me sanó" La sensibilidad de su cuerpo había sido restaurada. Le pidió al doctor que le quitara el yeso. Este se negó pero accedió a sacar de nuevo las placas de Rayos X. Se quedaron
maravillados, pues no pudieron ver ni aún dónde era que los huesos se habían roto. Aleluya. La intercesión en lenguas había logrado lo imposible. Se puede aumentar 100% el poder de la oración orando en el ESPIRITU yen lenguas. Gloria a Dios por el Espíritu Santo.

Pablo habla de sufrir dolores de parto hasta que Cristo sea formado en los Gálatas (Gálatas 4: 19) Esto implica gemidos hasta que nazca la nueva criatura en ellos. Cuando la mujer está a punto -de dar a luz siente dolores de parto y gime hasta que nace el bebé. En Isaías 66:8 dice; que en cuanto Sion estuvo de parto, dio a luz sus hijos. Así mismo según nosotros gemimos en oración, como con dolores de parto, Dios engendra hijos.

Como resultado de nuestras oraciones en el Espíritu con gemidos indecibles, nacen bebés en Cristo. Así también gemimos en la oración para que Cristo sea formado en los nuevos creyentes.

Pablo lo hacía (Gálatas 4: 19) LAS IGLESIAS son responsables de GEMIR COMO CON DOLORES DE PARTO para que CRISTO sea formado en los nuevos convertidos. Es similar al nacimiento físico. Nadie nace maduro. Nace un bebé y crece. Nadie nace un cristiano completamente maduro. Es primero un recién nacido y luego crece. Hay que enseñarles la Palabra. (Ira. Pedro 2:2) Además, la Palabra dice que oración con gemidos como de parto deben prevalecer por ellos.

Cuando Ud. esté orando en el Espíritu con gemidos, no se aparte, ni los impida, sino que responda a ellos. Recuerde que cuando Zion trabajó con gemidos como en dolores de parto dio a luz hijos (Isaías 66:8) Mientras Ud. gime, piense que está gimiendo para engendrar hijos y para que Cristo nazca en los nuevos creyentes, y no desista con facilidad. Persista y en su mente clame al ESPIRITU que le ayude, pues sólo El Espíritu Santo puede ayudarnos. Tenga la mente bien concentrada en Dios en una actitud de fe de que El está obrando en forma profunda para dar cumplimiento a las peticiones. Amén. Ud. Gime en el Espíritu y al mismo tiempo ora con su mente. Es oración
en el Espíritu y oración mental en forma simultánea. Gloria a Dios.

El pueblo de Israel conocía este secreto. En los momentos de desesperación ellos PROCLAMABAN AYUNO y lloraban gimiendo por horas delante de Dios hasta conquistar las victorias. (Jueces 20:26; Isaías 66:8) Aún para su crecimiento espiritual y PLENA CONVERSION sabían que no había otro secreto. En JOEL 2: 12 el Señor les había ordenado: "POR ESO PUES, AHORA, DICE JEHOVA, CONVERTIOS A MI CON TODO VUESTRO CORAZON, CON AYUNO Y LLORO Y LAMENTO:" Ellos lo hacían a pesar de no tener el BAUTISMO DEL ESPIRITU SANTO. Si los judíos podían GEMIR COMO CON DOLORES DE PARTO, sin la investidura del Espíritu, cuánto más nosotros que tenemos al AYUDADOR, EL ESPIRITU SANTO, dentro de nosotros. Ellos lo lograban por esfuerzo propio y la fe de que Dios escuchaba sus gemidos y respondía a ellos dándoles la victoria. Aleluya. Nosotros podemos hacerlo también por esfuerzo propio y con la fe de que el Consolador que está en nosotros nos ayudará en nuestras flaquezas y nos hará fácil conquistar las victorias. Gloria a Dios.
Cuentan peregrinos que en sus viajes a TIERRA SANTA han visto a los viejos rabíes judíos orando junto al MURO DE LAS LAMENTACIONES. Dicen que se han quedado maravillados al ver como gimen en ese lugar delante de Jehová.
Son gemidos como con dolores de parto y esto engendra hijos para Dios y las nuevas criaturas en los creyentes. Los JUDIOS LLORABAN Y GEMIAN delante de DIOS a pesar de no tener el BAUTISMO EN EL ESPIRITU. Nosotros la Iglesia de Jesucristo que tenemos el Poderoso Bautismo de Fuego y Espíritu podemos gemir y llorar con más facilidad que ellos, pues tenemos el ESPIRITU dentro de nosotros y además podemos interceder en otras lenguas conforme el ESPIRITU nos da para orar. Aleluya. Esto es Oración en el Espíritu que derriba las fortalezas del diablo y mueve las montañas para la gloria de Dios. Amén.

Estos no son instrumentos carnales y de sabiduría humana, sino las armas espirituales que tenemos que usar para que CRISTO madure los creyentes en cada Iglesia y vengan más nuevos creyentes. No es cuestión de atraerlos con todo tipo de métodos ingeniosos y elaborados por la mente natural, sino usar las armas espirituales que Dios nos ha dado para engendrar creyentes maduros. Gloria a Dios.

Se dice que en las campañas del Evangelista Charles G. Finney, alrededor del 80% de las almas salvadas perseveraban, nadie tuvo tanto éxito como él. ¿Cuál era el secreto? El dependía exclusivamente de la Oración. El tenía un anciano que le ayudaba en el ministerio. Lo enviaba a los lugares como 3 semanas antes de la campaña. Ese varón se conseguía dos o tres personas que entraran con el en un pacto de oración. Se apartaban a orar y clamaban y gemían por días. En una ocasión cuando Finney llegó a un pueblo para una campaña, una señora dueña del Hotel, le llamó y le dijo, que el anciano y dos más estaban en el Hotel hacía tres días, pero no habían comido nada. Ella curiosa fue al cuarto, y al abrir la puerta estaban con la cara en el piso gimiendo. "Han estado así por tres días," dijo ella. "¿Podría Ud. explicarme? "No es nada", dijo Finney, "Ellos, sencillamente tienen un Espíritu de dolores de parto en la oración." (Romanos 8:26-27, Gál. 4:19) estaban engendrando
hijos para Dios. Aleluya.

Finney mismo se levantaba todos los días a las 4 A.M. y se iba a un lugar adecuado y oraba hasta las 8 A.M. La oración intercesoria era el secreto de sus victorias. Sencillamente rompían el poder del diablo sobre los pecadores y los liberaban orando en el Espíritu. Gloria a Dios
.
Aun para Sanidad Divina, cuando todos los métodos fallan, la oración intercesora en el Espíritu, sería la respuesta. Esta oración como con dolores de parto, con gemidos y en otras lenguas a favor de otros, funciona en forma muy efectiva rompiendo las fortalezas del diablo. A veces no sabemos orar como se debe, por eso es menester que nos unamos con el ESPIRITU para sobreponer nuestras debilidades. El intercesor toma el lugar de otro al clamar por él. Hay un ministerio de intercesión y debemos clamar al Señor para que lo manifieste en plenitud en nosotros. Esto incluye orar en el Espíritu.

Cristo en la Cruz tomó nuestro lugar y ahora es el INTERCESOR por excelencia. Nosotros los discípulos seríamos semejantes al Maestro. Amén. Todos fuimos llamados a ser sacerdotes de Dios y de Cristo. Aleluya.

Cuando vengan problemas, póngase de rodillas y diga: "Señor, no sé cómo orar por esto; no sé orar como debería, pero tú sabes que Tu Palabra dice que el Espíritu Santo sería mi ayudador intercediendo. Yo confío y creo que tú me ayudarás.
Comience entonces a orar en lenguas y con gemidos. Tenga la fe y crea que El no va a fallar en ayudarle. Ud. entre, y el Espíritu no fallará en ayudarle conforme Dios ha prometido. En su mente ore y crea con profundidad mientras gime.
El famoso Evangelista Smith Wigglesworth decía: "A veces comienzo a orar por mi mismo sin ninguna unción especial. Comienzo en lo natural y termino en el Espíritu". A veces comenzamos a predicar en lo natural. No sentimos la unción, pero comenzamos creyendo que EL ESPIRITU nos va a ayudar. Hacemos
el esfuerzo y predicamos y de pronto sentimos cuando El viene sobre nosotros y seguimos en el ESPIRITU. Así es la oración.

Algunos esperan que el ESPIRITU les obligue o les haga sentir algo especial. No tenemos que esperar a sentir algo especial. Es sólo creer que el AYUDADOR está ahí y que podamos pedirle al El que nos ayude. Según nos lanzamos y creemos que El nos está ayudando, EL ESPIRITU tomará dominio de nuestro espíritu y luchará junto con nosotros contra el problema. Amén.

Tú puedes ayudar a levantar una carga espiritual, al igual que puedes ayudar a levantar una carga material. Cuando hay alguien gimiendo e intercediendo en el Espíritu, tú empiezas a hacer como él está haciendo. Tienes La Fe de que el Espíritu te ayudará. Sigue la intercesión hasta que sientas un espíritu de gozo y alabanza y hasta de deseos de reír. Es señal de que la victoria ha sido alcanzada. En una oración intercesora, déjese ir en la oración. Ceda a ella. No tenga temor. Esto no viene de la mente o de la cabeza. El Espíritu Santo ayuda a nuestro espíritu a orar. A veces no sabemos exactamente por qué orar, pero al comenzar a orar en el Espíritu, Dios puede mostrarte por qué estás orando. Gloria a Dios.

Cuenta el Evangelista Keneth Hagin , que visitaba a un agricultor cristiano. En el hogar se encontraba un doctor, hermano del agricultor, que se burlaba del Evangelio. Cuando fueron a dar gracias por la comida el agricultor salió gimiendo y se puso en pie y se fue a su cuarto. El doctor lo siguió. Cuando
salió del cuarto le dijo al Hno. Hagin. "Parece que tiene dolores, vaya buscar unas medicinas." El hermano Hagin le dijo: "No se preocupe por él, está gimiendo por Ud. en el Espíritu, pues Ud. está perdido." El doctor se negó a creer. Hagin entró al cuarto. Se arrodilló al lado del hermano y comenzó
a gemir igual que él. Así estuvieron como por 45 minutos. De pronto ambos comenzaron a reírse. Sentían un gozo sobrenatural. Se pusieron de pie. Hagin fue a buscar el doctor. Este le pregunto por su hermano. Hagin le dijo: "Está
muy bien, y en cuanto a Ud. no hay forma de que se pueda perder." El médico lo miró extrañado, pero de pronto se arrodilló, comenzó a llorar y fue salvado gloriosamente. Aleluya.
La Oración intercesora en el Espíritu había obrado el milagro. Gloria a Dios.

Clame para Dios le dé un ministerio pleno de intercesión. Amén.

En la oración intercesora tratamos con el Espíritu detrás de la persona. Dios nos ha dado los instrumentos para romper las fortalezas del diablo. Dios no lo va a hacer. El nos ha dado los instrumentos a nosotros. Si no lo hacemos nosotros, esas fortalezas nunca serán derribadas. El siervo de Dios es el que hace que sucedan las cosas con su oración intercesora. (2 Corintios 10:4-5)
"Y busqué entre ellos un HOMBRE que hiciese vallado y que se pusiera en la brecha delante de mi a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y NO LO HALLE. Por tanto derramé sobre ellos mi ira: con el ardor de mi ira los consumí; hice volverse el camino de ellos sobre su propia cabeza, dice Jehová
el Señor, (EZEQUIEL 22:30-31) Un solo hombre pudo haber evitado intercediendo, este juicio terrible.

 Clama tú hoy. "Úngeme, Señor. Lléname. Estoy dispuesto a interceder por
ellos para que sean salvos." Dios te usará en el ministerio de intercesión y las fortalezas del enemigo serán destruidas. Todo ministerio tiene un ministerio de intercesión. No se conforme sólo con hablar y enseñar y construir. Interceda con gemidos y llanto y en lenguas y en ayuno y rompa toda traba satánica y
engendre hijos para Dios. Amén.


EXTRACTO DEL LIBRO “LA CIENCIA DE LA ORACION” por Yiye Avila

1 comentario :

Gracias por visitar nuestro blogger, que Dios le bendiga grandemente. Gracia y Paz.